Yonkiprisas y Cronoyonkis, dos términos que definen y dividen a los miembros del grupo de los
Asaltablog.
Yonkiprisas: Dícese del asaltante que pierde el culo por
visitar a su presa y saquear su recetario en cuanto descubre quien es el
objetivo del mes. Son los que le quitan el puesto a la abuela de la fabada con
lo de “” que hay prisa, que hay prisa”” para luego tirarse a la bartola el
resto del mes viendo como los Cronoyonkis se tiran de los pelos arañando los
últimos minutos para realizar sus entradas.
Cronoyonki: Dícese del asaltante que espera al último día, a
las últimas horas del último domingo del mes para desvalijar el recetario del
blog objetivo del mes. El “”Uffff, pues no queda na”””, o el “” queda muuucho
tiempo”” son dos de sus frases preferidas. Adictos a la adrenalina que les
proporciona el hecho de correr para conseguir algo y no quedarte fuera. La
mayoría de veces por tener la agenda saturada por otras cosas que también han
dejado para el último momento, el resto simplemente porque ya están
acostumbrados y no conciben lo de hacer algo con algún tiempo de antelación.
Uno de los problemas, grandes problemas con los que se
encuentra un Cronoyonki es el hecho de la falta de tiempo que algunas veces
requiere una determinada receta, lo que limita la elección de recetas para el
asalto.
Yo?
Por supuesto Cronoyonki!!!
Da igual que planeé mi asalto con antelación, que me
proponga una fecha para elegir una receta, cocinarla, fotografiarla, devorarla
y preparar mi entrada, es tontería. Si no es por una cosa es por otra siempre
la dejo para última hora. Es como que trabajar con presión para llegar a la
fecha y hora fuese mi objetivo.
Y como eso de tener la mano larga nos puede a todos y este
mes no teníamos nada que hacer ya que la temporada terminó el mes pasado pues
decidimos organizar un torneo entre Yonkiprisas y Cronoyonkis. Objetivo?
Encontrar al más rápido en el primer grupo y en el caso del segundo grupo claro
está que el vencedor será aquel que envíe su enlace en el último lugar.
Como si de un amigo invisible se tratase, nadie sabe quién
es el que se colará en cada cocina.
En mi caso el blog de Fran Cabrera Qurico ha sido mi
objetivo este mes. Te invito a pinchar en su enlace para descubrir la cantidad
de recetas que tiene publicadas. Me quedo con muchísimas recetas suyas que
guardaré para otras ocasiones.
Su hamburguesa de pan negro ya no me la pude quitar de la
cabeza por más que veía otras recetas igualmente deliciosas.
Fran, sintiéndolo mucho la hamburguesa de calamar me la dejo
pendiente para otra ocasión ya que no contaba con calamares en casa para
realizarla (otro de los inconvenientes de los Cronoyonkis)
Ingredientes:
Para la masa (4 panecillos de unos 130g cada uno):
300g de harina de fuerza
200ml de leche (en su receta Fran solo utiliza 100ml pero a
mí no se me formaba la masa por lo que tuve que añadir otros 100ml+)
2 cucharadas de levadura liofilizada
50g de mantequilla derretida
4 bolsitas de tinta de calamar
1 cucharadita de sal
Semillas de sésamo
Para el relleno
Hamburguesa de salmón y merluza
Hojas de espinacas
Lonchas de queso cheddar
Salsa tártara
En el bol de la amasadora ponemos la harina, mantequilla
derretida, la leche tibia con la levadura diluida y la sal en un lado.
Amasamos con el gancho a velocidad media y dejamos batiendo
unos 5 minutos (también podemos ahorrarnos el gimnasio y hacerlo a mano
amasando unos 10 minutos). Vamos añadiendo las bolsitas de tinta para que se
integren en la masa.
Quedará super negra y nada pegajosa. Dejamos la masa en el bol tapado con film o
con un trapo húmedo y dejamos levar hasta que doble en tamaño en un sitio donde
no haya corrientes de aire.
Una vez haya levado dividimos la masa en cuatro y formamos
las bolas. Las colocamos en la bandeja del horno con la parte lisa hacia
arriba. Las tapamos de nuevo con film y dejamos que vuelvan a levar hasta
doblar el volumen.
Precalentamos el horno a 180 grados
Rociamos los panecillos con agua y ponemos el sésamo por
encima.
Horneamos unos 15 minutos y dejamos enfriar en una rejilla.
Mientras hacemos las hamburguesas a la plancha en una
sartén.
Abrimos el pan y colocamos en el la hamburguesa, el queso
cheddar, las hojas de espinaca y la salsa tártara.
Está increíble.
El pan me ha encantado tanto por la consistencia, la miga,
el color, el sabor…
Una hamburguesa completamente diferente a las que estamos
acostumbrados en casa, una hamburguesa que sin duda volveremos a saborear,
tanto en esta misma versión como en la que nos presenta Fran en su entrada, que
con su hamburguesa de calamar seguro estará espectacular.
Espero que os haya gustado y os decidáis a probarla, ya me
contareis!!!
Mil besos