Bueno… por fin por aquí!
Recordáis que hace unas de semanas os traía unos huevos a labenedictina?
Os prometí que para la semana siguiente os traería la receta
de los muffins ingleses pero he estado liada de más y el tiempo no da más de
sí.
Así que ahora que tengo un hueco aprovecho y comparto con
vosotros una receta que me ha sorprendido, que está buenísima y que se prepara
en un ratito.
Son unos panecillos muy esponjosos, se les conoce también
como hot muffin o breakfast muffin, normalmente se toman en el
desayuno o en el té abiertos por la mitad, tostados, untados con mantequilla y
con una buena capa de mermelada o para un desayuno redondo con unos huevos a la
benedictina! Aunque también se pueden tomar con una gran variedad de rellenos y
así prepararnos unos bocatas de lujo para la cena!
La receta es una
adaptación de la de Silvana Cocina, os dejo aquí el enlace a su canal.
Nos ponemos el
delantal?
Venga, apuntad
Ingredientes:
500g de harina
125ml de leche tibia
250ml de agua tibia
25g de azúcar
5g de sal
1 cucharadita de levadura liofilizada
80g de mantequilla sin sal
Simplemente tenemos que poner todos los ingredientes en el
bol de la amasadora y con el gancho amasarlos unos 5 minutos hasta obtener una
masa suave y que no se pegue a las paredes. Si no tienes amasadora no te
preocupes, también puedes hacerlo a mano, simplemente mezcla todos los
ingredientes en un bol y con la ayuda de una cuchara o tu propia mano hasta
conseguir una bola, después amasa unos 15 minutos hasta conseguir que la masa
quede suave y ya no se pegue a la mesa.
Tapa con film en bol y deja reposar hasta que la masa
duplique su tamaño. Si quieres acortar el tiempo de levado mete el bol tapado
con film en el horno y enciéndelo a unos 40-45 grados calor arriba y abajo, en
una media hora habrá duplicado su volumen.
Una vez haya levado, espolvoreamos la mesa con un poco de
harina y volcamos sobre ella la masa, con un rodillo la extendemos hasta
dejarla más o menos con un centímetro y medio de grosor. Con la ayuda de un
cortapastas redondo o simplemente con un vaso ancho cortamos discos de masa. La
masa sobrante la volvemos a amasar, estirar y volvemos a cortar más discos
hasta aprovechar toda la masa.
Dejamos los discos reposar una media hora.
Ponemos una sartén al fuego medio bajo, pintamos con un
poquito de mantequilla toda la superficie y cuando esté bien caliente ponemos
los panecillos sobre ella. Los dejamos hacer unos 8 minutos por cada lado.
Y listos!!!
De verdad que no pueden ser más rápidos y sencillos.
Quedan super tiernos, blanditos, están de vicio!
Aguantan perfectamente unos dos o tres días guardados en un
taper. Para disfrutar de ellos tan solo tendremos que abrirlos a la mitad y
tostarlos en la tostadora, quedarán como recién hechos!
Nos vemos el domingo con una nueva
entrada del Asaltablog!
Espero que os animéis a
prepararlos, os sorprenderán seguro.
Mil besos a todos! Muuuuuak
mmm q buena pinta, además parece no muy dificil y con poquitos ingredientes jeje
ResponderEliminara ver si me animo a hacerlos
un beso